UPC PLANEA SUMAR CINCO NUEVAS ESPECIALIDADES EN ODONTOLOGÍA

La Universidad Peruana de Ciencias Aplicadas UPC, con reciente acreditación internacional, inauguró un moderno Centro Universitario de Salud, con una inversión de cuatro millones de dólares con la cual pretende mejorar la formación de los alumnos en las especialidades y subespecialidades de odontología, rehabilitación física, psicología y nutrición. Además, el decano de la Facultad de Salud, Dr. Pascual Chiarella, anuncia para un futuro cercano una nueva oferta de especialidades en odontología. 

¿Cómo nace la idea de crear este Centro Universitario de Salud en su campus de Chorrillos?
Toda universidad que tiene ciencias de la salud tiene dos funciones: la formación de recurso humano apropiado y brindar un servicio, no solo académico de formación de recurso humano, sino de uno de responsabilidad social hacia el grupo humano aledaño o a la población a la que depende. El Centro Universitario de Salud de la UPC, nace como ese segundo último concepto. Se requiere espacio académico profesional y asistencial para que nuestros alumnos puedan ejercer el aprendizaje de la profesión y se requiere brindar el servicio de responsabilidad social asistencial a la población. Esas dos cosas se juntan y van a la idea de hacer un Centro Universitario de Salud.

¿Cómo ha sido el proceso de implementación?
Nosotros teníamos antes lo que era una Clínica Odontológica pura, que en algún momento incorporó el concepto de una parte asistencial en la parte física pero lo que hemos hecho ahora es ampliar esta gama de servicios hacia la parte de nutrición, dietética y psicología, por eso es que se construye y se implementa el espacio físico para poder brindar un servicio de atención en esas cuatro ramas.
No tenemos medicina en el Centro porque el servicio es mucho más complejo que implica una serie de cosas más importantes como tener un centro de emergencia que es mucho más difícil de manejar.

Pero, ¿el plan a largo plazo es implementar medicina?
No tenemos medicina en el Centro porque el servicio es mucho más complejo que implica una serie de cosas más importantes como tener un centro de emergencia que es mucho más difícil de manejar. No me atrevo a decirlo pero podría ser que se implemente en el futuro.

¿Por qué no necesariamente se puede implementar medicina?
Porque es mucho más complejo. Nosotros estamos al costado de una carretera y si hubiera un accidente y nosotros ofrecemos medicina tenemos que tener toda la infraestructura para dar la atención adecuada. Si es un paciente que requiere una intervención quirúrgica urgente esto requiere de una sala de operaciones, es un sistema más complejo. No está preparado el centro para ese tipo de emergencias.
¿Cuándo fue la inversión del centro?
El centro está alrededor de los cuatro millones de dólares por la infraestructura y por el equipamiento que requirió. En realidad con los últimos equipos que estamos comprando e instalando de realidad virtual el costo se incrementa. Pero más importante es la estructura académica y asistencial que se va brindar en el centro; siempre habrá la supervisión de un profesional, la posibilidad de interactuar con los alumnos y profesionales de las otras carreras. Ejemplo, no es malo pensar que un niño con problemas odontológicos con un déficit nutricional podría recibir el soporte nutricional para que con las estructuras que tiene poder masticar. Exactamente igual un paciente que tiene un problema odontológico y es afectado por una cirugía, muchas veces también tiene que tener soporte psicológico y para eso está el psicólogo. Es más, muchos pacientes que tienen deficiencias por ejemplo parálisis cerebral y que requiere terapia física importante, también requieren el soporte nutricional y manejo odontológico, eso puede ser manejados integralmente en un centro de este tipo.
Para el Centro han adquirido tecnología única en el país y Latinoamérica, ¿cuál es esa tecnología?
Son dos Simuladores de Realidad Virtual con tecnología háptica de la casa MOOG. En América Latina somos los únicos en tenerlo. Lo tienen en una universidad de Pensilvania y ahora nosotros. Hemos adquirido dos de ellos, cada uno por una inversión de 180 mil dólares. Los alumnos ponen unos lentes y tienen la sensación que están tocando una muela pero no hay nada en realidad.

¿Crear un Centro de este tipo también responde a una necesidad en el sector que tiene pocas vacantes para este tipo de especialidades?
De hecho sí. Por ejemplo, la odontología pediátrica, un grupo que suele no estar muy bien vigilado son los grupos con algún tipo de déficit neurológico, por ejemplo uno con síndrome de down que cada vez son más incorporados en la sociedad. Ellos requieren de un soporte o manejo odontológico especial que debe ser manejado por el especialista y que además requiere un tipo de terapia física. Hay muchos que no tienen este tipo de manejo profesional en salud y que no les permite desarrollar sus habilidades y reincorporarse a la sociedad. El país tiene una legislación sumamente rica en el manejo de pacientes que tienen algún tipo de deficiencia y no hablo de deficiencia intelectual.
¿Cuántos alumnos van a rotar y en qué tiempo por el Centro?
Tenemos alrededor de 120 a 180 alumnos que rotan en periodos distintos. El número de alumnos que rotan juntos esta alrededor de 50 en todo el centro y rotan en periodos y horarios distintos y que permite, con la vigilancia y supervisión de un numero alrededor de entre 20 y 30 profesionales, atender a los pacientes de forma apropiada. En el caso de subespecialidades de odontología contamos con cinco, ellos ya son profesionales odontólogos que vienen a formarse en una especialidad en un nivel más alto y complejo, y que tienen a su vez, otros odontólogos con mucho más experiencia que los ayudan a entrenarse en las cinco aéreas que tenemos: rehabilitación oral, ortodoncia, Implantología, periodoncia y odontología pediátrica. Son profesionales que además se incorporan al trabajo asistencial para hacer las cosas lo mejor posible para los pacientes.
¿Cuál fue el principal reto de diseñar y poner en marcha este centro?
La misión de UPC es formar líderes íntegros con visión global que transformen el Perú. Esto significa que tengo que formar a profesionales con integridad, solidez, conceptos éticos y conocimiento académico apropiado para hacer una buena atención. Y eso es lo que cumple el centro. Es un centro de muy alto nivel comparable a cualquier institución del extranjero en su calidad, atención y limpieza. Una pulcritud de los equipos que tiene y lo que busca es una correcta formación profesional. El trabajar con pacientes, seres humanos pares, requiere que mi servicio a ese ser humano sea lo mejor que yo pueda, para eso tengo que tener el aparataje e infraestructura lo mejor posible para acostumbrarme a darle al paciente lo mejor que requiera. Ese es el principal objetivo: la calidad en el servicio académico y profesional humano para que el paciente sea correctamente atendido. Si logramos hacer que esto contribuya con un granito de arena para que otros todos hagamos lo mismo, vamos a contribuir a que el sistema de salud mejore. No somos definitivamente los únicos que hacemos esto pero lo interesante o lo mejor sería que todos hagamos siempre lo mejor posible por el paciente y eso es una escala de calidad que debemos hacer para que todos cumplamos un servicio apropiado.
¿Están escritos ante los entes regulatorios como una IPRESS?
No estamos inscritos como una IPRESS porque somos un Centro Universitario, no médico, que tiene cuatro carreras no médicas. Estamos autorizados y fiscalizados por el Ministerio de Salud, cumplimos la norma legal del MINSA para ofrecer servicios de calidad, pero no estamos insertos en un sistema integral aun, porque eso es ingresar a un sitio que no es nuestra competencia, que es la formación de recursos humanos adecuados. Cumplimos todas las normas de bioseguridad y estamos registrados más no necesariamente como médicos.
¿Red internacional de Universidades Laureate ha participado en la supervisión, asesoría y recomendación del Centro Universitario de Salud?
En la asesoría. La responsabilidad es de UPC. La ventaja de una red de este tipo es que permite hacer lo que se llama ejercicio de buenas prácticas. ¿Las BP que hacen? nos permiten aprovechar la experiencia de otra universidad en otra parte del mundo para incorporar y aplicar acá. Pero no pueden intervenir porque la reglamentación del MINSA, son más estrictas que en otros países en cuanto a normas y espacios, lo cual se ha hecho. Esa exigencia nacional la cual es correcta, y no discuto, nos permite tener un centro mucho más grande y seguro de lo que podría haber en otros sitios. Eso es Ingeniería hospitalaria de alto nivel. Utilizar la tecnología de punta para manejar bioseguridad, el uso de los simuladores de alto nivel para hacer realidad virtual. Por ejemplo los que tenemos acá son unos simuladores en la que se trabaja en una pantalla y tengo la sensación perfecta de lo que se siente en la mano del operador sobre si fuera un paciente real. Eso es como usar simuladores de la nasa en la parte odontológica que permite enseñarle al alumno antes de que tenga que aprender con el paciente.
¿Qué competencias van a adquirir r los alumnos que pasen por este centro?
Va poder hacer un procedimiento mucho más apropiado y con seguridad para el paciente de forma correcta.
¿Cuáles son los proyectos de la Facultad de Salud que piensan realizar en los próximos dos años?
El principal proyecto que tenemos dentro de la facultad es la parte, ahora sí, del desarrollo profesional médico. Lo que vamos a hacer es que nuestros médicos siempre estén relacionados con el sector y siempre estén trabajando y conociendo lo que el sector necesita.
La siguiente expectativa podría ser el desarrollar, así como la odontología, las especialidades. Desarrollar algunas especialidades en medicina, con la visión siempre de poder ofrecer un estándar apropiado en su formación y poder ofrecer a través de una formación apropiada el nivel de profesionales que requiere el país. El país produce actualmente tres mil médicos por año, en las diferentes facultades de medicina. Sin embargo, solamente se entrenan como especialista alrededor de 1.800, de repente un poco más. Pero se requiere muchos más. Hay zonas del país que no tienen un solo especialista apropiado. Y no hablo de un cirujano cardiovascular, sino de un pediatra o médico internista. No todas las zonas del país tienen este tipo de formación y podemos contribuir a ese nivel. Obviamente lograr formar subespecialidades que son la segunda especialidad como de un cirujano cardiovascular, un neurólogo pediatra o un cirujano pediatra de muy alto nivel, esa competencia es mayor y compleja que también se requiere algo que, ojalá se pueda desarrollar en los próximos años, es la cirugía cardiovascular pediátrica. Comparado a la zona geográfica hay mucho por aprender y hacer en medicina.
¿Esas expectativas en nuevas especialidades cuándo se calculan concretar?
Esperamos que en los próximos tres o cuatro años podamos estar iniciando el desarrollo de las especialidades en medicina. En Odontología estamos empezando con cinco especialidades y esperamos tener otras cinco próximamente dentro de los próximos tres o cuatro años también. Ya serían diez en odontología. Hablar de especialidades en terapia física y nutrición también nos permitiría hacer una oferta más especializada y más apropiada a lo que el país requiere.
¿Qué especialidades en medicina serían las que ofrecerían según lo que necesita el país?
Una de las que más se necesita es la medicina familiar, el médico familiar es aquel que tiene la capacidad de poder resolver el 80% de los problemas de la atención ambulatoria y eso es algo que hace falta. En el país se requiere que haya una capacidad resolutiva antes que el paciente entre al hospital. Lo que quiere decir esto es que si yo tengo un buen médico familiar correctamente formado en un consultorio ambulatorio, sin que ser el paciente tenga que ser hospitalizado, se puede resolver el problema, y se calcula que más o menos entre el 70% u 80% de la patología puede ser resuelta antes del hospital. Los especialistas y sub especialistas son para hospital, pero todo eso se puede trabajar desde antes, en el primer nivel. Hay que potenciar el primer nivel para mejorar las condiciones de salud del país.

La Facultad de Salud ha hecho un foco especial en odontología, ¿es por el número de alumnado en esta carrera en la Universidad?
No, en parte porque funciona como el principal centro educativo de la carrera. Mientras que medicina se requiere formar en hospitales y centros de nivel primario en toda la ciudad al igual que nutrición y terapia física, odontología no tiene otro sitio donde trabajar. Si bien hacen rotaciones en algunos consultorios en clínicas especializadas, nosotros le damos un sitio especializado un “aula” muy bien hecha para ellos, esa es la función más importante del centro. Lo odontólogos son los que se forman más en un centro de este tipo más que en otros sitios distintos. Por eso que la principal fuente de trabajo es para odontología.
¿La inversión en el Centro también debe haber sido más para odontología porque los equipos son más costosos?
Es mucho más caro, diría que la inversión sería en un 80% para odontología. Es un centro universitario de primer nivel.
¿Este Centro Universitario es parte de lo que tiene que cumplir la UPC como requisito mantener la acreditación americana que obtuvo hace poco?
Es parte de lo que se requiere para hacer una atención de calidad. ¿Una acreditación de calidad que cosa es lo que ofrece? Primero, reconocer déficit, una autoevaluación, reconocer deficiencias y hacer planes de mejora para que cada vez mejore. Esto al final entra en un círculo virtuoso. Cada vez que puedo me autoevaluó, busco hacer las mejores e implemento las mejoras.
Pero, efectivamente cuando vino WASC que es la acreditadora norteamericana que nos ha dado una acreditación internacional presenció lo que estábamos haciendo en el Centro de Salud y vio que era parte de nuestra mejora de calidad de educación y oferta para nuestros alumnos y la población. Ellos visitaron el Centro Universitario de Salud y el edificio de la facultad y vieron como nuestros procesos académicos y educativos se integran de forma apropiada para buscar hacer que lo que decimos en verdad se hace: hacer una formación por competencias apropiada para formar profesionales de la salud que sepan lo que tienen que hacer entrenados en forma apropiada y que brinden un servicio profesional cuando ya no sean profesionales al paciente tanto académicamente hablando, moralmente hablando, éticamente hablando, con las competencias necesarias para hacer las cosas bien hechas.

Así como hay escasez de especialistas en el Sector Salud, ¿existen también escasez de docentes calificados en las facultades de medicina?
La ley universitaria reciente promulgada en el 2014 establece que los profesores universitarios deben de contar con ciertos niveles. El principal nivel es la carrera profesional y el segundo es el de la maestría. Es cierto que no es un sector muy grande y ese es un reto para el país, buscar que nuestros profesionales se capaciten cada vez para que a su vez puedan transmitir información. Lo típico en salud es que la formación profesional siempre es una formación en escalera. Es decir, voy a prendido cada vez más y eso me permite que, al que está un escalón abajo, ir enseñándole. En salud usualmente eso ocurre. El especialista enseña al que está formándose. El subespecialista le enseña al especialista. Nosotros contamos con profesionales de las diferentes carreras que nos permite garantizar que nuestra formación sea apropiada y eso se ve en la evaluación WASC, la acreditadora cuando nos visitó hace una comparación con el modelo americano, y contamos con la formación de profesionales adecuada para poder hacer educación y con nivel de maestría que se requiere para hacer la capacitación a los alumnos.

¿Cómo marcha la acreditación nacional de la Facultad de Salud?
La ley universitaria exige la acreditación nacional para el sistema SINEACE para carreras de salud entre otras. Ya tenemos una acreditación SIENACE en Nutrición y ya estamos en el proceso de lograr las acreditaciones nacionales a través del SINEACE para Medicina, Odontología y Terapia Física. Se hace por programas. Eso es parte del sistema que nos exige la acreditación internacional WASC, porque hay una revisión de programa que permite hacer una evaluación constante de las carreras año a año y eso se suma a la acreditación SINEACE para asegurar que nuestra educación y sistema de educación sea el apropiado.

¿Cuál es su mirada nacional en cuanto a cómo está la educación médica en el país, y sus facultades de medicina?
La formación médica en el Perú usualmente ha sido muy buena siempre se hizo una “evaluación” por competencias. Si tuviera yo que hacer un paralelo en el historio de lo que significa la formación por competencias, la formación en medicina usualmente es en competencias porque el médico con su alumno al costado enseñaba y hacia que el alumno tenga las competencias para hacer el diagnóstico apropiado. Lo que demanda ahora el país, es hacer que en esta expansión de la educación médica que se ha dado, creo que con lógica razón, pueda asegurar que esa formación por competencia se mantenga. Eso demanda que los sistemas de acreditación vigilen y supervisen que la formación así se esté dando.
La Asociación de Facultades de Medicina pone unas exigencias que se debe cumplir y todos los que somos parte de ella estamos fiscalizados y evaluados, entre comillas, para hacer que esas competencias se adquieren y se desarrollen apropiadamente. Es un reto para el sistema nacional de acreditación el SINEACE el vigilar, e incluso también para SUNEDU, vigilar que las facultades de salud o escuelas de medicina cumplan con esos requisitos. No puedo negar que hay varias universidades que lo hacen bien hechas como nosotros, pero ya es parte del sistema que esto se cumpla bien en todas las escuelas.
Este nuevo Centro debe ser un aprendizaje también para la universidad…
Es tan cierto lo que dices que es sí es uno de los principales retos porque yo actúo como director médico del centro, en busca de hacer entender que el centro asistencial siendo académico tiene que cumplir todas las reglas asistenciales como seguridad, respeto a la confidencialidad de los pacientes, protocolos de seguridad, autorizaciones escritas, los pacientes tienen que formar una autorización y se le tiene que explicar, consentimientos informados para que el paciente se sienta cómodo, es parte del ejercicio.
Por otro lado este Centro también tiene que gestionarse de tal manera que pueda ser sostenible económicamente…
Es un reto nuevo para la universidad y tenemos personal apropiado para eso, que ha sido especialmente contratado y está haciendo supervisado y entrenado en eso. Parte de lo que se hace en buenas prácticas a nivel de las universidades de Laureate, también permite aprender en esa parte, como es la experiencia en un sitio para mejorar y pulir.

¿Qué modelo de gestión es el que han adecuado a este centro?
El modelo de gestión de un Centro Odontológico Universitario es distinto al de gestión de una clínica privada. Se asume que en los centros formadores de profesionales tienen costos más bajos, obviamente, pero que permiten hacer una atención exacta y justa pero que no permita ahogar al centro. Es un balance exacto para que esto vaya de igual a igual y que no haya ni pérdida ni ganancia a para que esto sea lo justo y exacto para que el paciente sea beneficiado con una buena atención a un costo razonable y el alumno sea entrenado apropiadamente.
El beneficio para la universidad es entonces…
La formación de sus alumnos y el ejercicio d la responsabilidad social universitaria.

¿Hay una mejora del nivel en la modernidad comparado a los centros de otras universidades?
De hecho casi todas las universidades que forman odontólogos tienen que tener un centro. Pero con seguridad puedo decir que este es uno de los más modernos de los que hay.