¿DE QUÉ SE MUEREN LAS PERSONAS EN EL PERÚ?

Un análisis de las causas de mortalidad en el Perú publicado recientemente por el Centro Nacional de Epidemiología, Prevención y Control de enfermedades con el apoyo de Vital Strategies, nos permiten saber dónde y contra qué enfermedades actuar con urgencia.

Un valioso documento que el  Ministerio de Salud acaba de publicar muestra la comparativa de la mortalidad entre los años 1986 y 2015, con diferentes análisis por número de defunciones, edades, enfermedades, zonas y demás que ayudarán a los profesiones de salud pública a hacer investigación para conocer las causas profundas de estos fatídicos desenlaces.

Dentro de este estudio se puede observar que la tasa bruta de mortalidad en el Perú en el 2015 fue de 5.6 muertes por mil habitantes; el cual tuvo una tendencia descendente rediciéndose en un 43% entre los años 1986 y 2015. Otro dato importante es que en el año 2015 las personas mayores de 80 años tuvieron un mayor número de defunciones que representaba el 27% del total, caso contrario ocurría en 1986 en el que solo representaba el 11%.

Pero en el 86´ las muertes se concentraban en los niños menores de cinco años que representaban el 31% de las muertes, distinto a lo que ocurre hoy en día que solo llega al 8% del total de las muertes. Esto podría dar pie a hipótesis que los estudios posteriores deben certificar. Si se trata de que se ha mejorado la atención sanitaria a este grupo etario y se ha descuidado a los adultos mayores o están llegando a esas etapas de su vida en mal estado de salud.

“El estudio no pretende responder todas las preguntas al contrario nos están generando mucha preguntas que van a hacer motivos de otras investigaciones. En esta reunión de presentación han estado todos los decanos de las facultades de medicina, porque hay temas aquí de tesis e investigación para resolver esas preguntas y ver dónde vamos a re direccionar los esfuerzos del MINSA para prevenir y controlar las enfermedades que están generado estas muertes” señaló el Dr. Luis Antonio Nicolás Suarez Ognio, Director General del Centro Nacional de Epidemiología, Prevención y Control de enfermedades.

Parte del estudio señala que las muertes por enfermedades infecciosas ha tenido una reducción considerable, del 1985 al 2015, no tan de igual forma pero con reducción ha ocurrido en las enfermedades circulatorias  más no se ha podido reducir ls muertes por neoplasias o lesiones externas.

Además, entre las cinco primeras causas de muerte en el 2015 está la infección respiratoria aguda baja, enfermedad cerebro vascular, diabetes mellitus, enfermedad isquémica del corazón, cirrosis y otras enfermedades del hígado.

Lo más preocupante es como se han invertido las causas de muerte por enfermedad pues hace 30 años, la enfermedad infecciosa intestinal ocupaba el segundo lugar de causa de muerte y hoy en día ubica el puesto 39, al igual que la tuberculosis que le seguía los pasos y ahora está en el puesto 17. Los trastornos respiratorios perinatales estaban en el cuarto lugar y ahora está en el puesto 20 de las causa de muerte.

No obstante, las malas noticias y a todas luces es la pandemia de las enfermedades cerebrovasculares, que pasaron de estar en el puesto 20 hace 30 años para estar en la segunda causa de muerte, al igual que la diabetes mellitus que estuvo en el puesto 23 y ahora está tercero. Todas estas causas de muerte en el país hoy en día, son causas asociadas al estilo de vida de las personas.   De la que hace 30 años produce más muertes y lo sigue haciendo es la infección respiratoria aguda baja.

“Indudablemente aquí se combinan varios factores. En primer lugar el cambio de los estilos de vida la población que pasa más horas sentadas, en la televisión o en los juegos electrónicos y hay menos actividad física, ese es un factor importante. Necesitamos también que la población entienda que si fuma y no se hace pruebas para diagnosticar un problema a tiempo va acabar mal, como estamos viendo en las cifras” argumenta el Dr. Luis Suarez Ognio.

Efectivamente, la mortalidad por la enfermedad cerebro vascular y por diabetes aumentó en todos los escenarios del estudio. Incluso la mayor mortalidad se presentó en las personas que viven en el ámbito rural y en la población pobre, las tasas más altas se presentaron en los departamentos de Amazonas, San Martin, Apurímac y Cajamarca.

De otro lado, las muertes por neoplasia maligna el más frecuente en hombre fue del cáncer de estomago y en el sector rural, región de la sierra y en la población pobre. Un agente que interviene aquí es el helicobacter Pylori, la cual en parte se trasmite por alimentos y bebidas insalubres frecuentes en ambientes sin agua y alcantarillado.

“El reto es que se use la información para tomar decisiones y que eso resulte en una política específica para hacer cosas pues hay casos de mortalidad que son prevenibles para lo cual hay que hacer políticas para que las cifras se pueden reducir aún más la mortalidad” señaló Cynthia Driver, asesora técnica de Vital Strategies, quien participó del estudio junto al Dr. William Valdez.

Pero, ¿de qué manera el Centro Nacional de Epidemiología, Prevención y Control de enfermedades, usa esta información para tomar acciones? “Una de nuestras áreas es la dirección de inteligencia sanitaria, en la que hacemos análisis de información en salud para identificar tendencias y prioridades y luego proveer información a los otros órganos responsables de intervenir ante la población y orientar al MINSA hacia donde debe dirigir sus esfuerzos” indicó el Dr. Dr. Luis Suarez Ognio, tras reunión con los responsables de las Direcciones Regionales de Salud.