Una nueva terapia que logra poner en remisión a los pacientes con artritis reumatoide, tan igual que los tratamientos con medicamentos biológicos, está a disposición de los pacientes del Sistema Integral de Salud desde hace algún tiempo y puede ser recetada por el médico especialista para luchar contra este mal que aqueja a 150 mil peruanos.
Se trata de un fármaco innovador llamado tofacinib, que es de síntesis sintético y de uso vía oral aprobado para pacientes con artritis reumetoide en estado avanzado o grave que no respondan al tratamiento estándar de metotrexate. De esta manera se evita que los que sufren de este mal se deformen e incapaciten y hasta mueran.
«Entró al sistema este último medicamento sintético en pastillas y que tiene un mecanismo como los biológicos. Los reumatólogos felicitamos esta situación y de que ya tengamos estos medicamentos para la gente de menos recursos y pueda recibirlos desde lo más temprano de su enfermedad y evitar que se vayan deformando o muriendo» indicó el reumatólogo Oswaldo Castañeda de la Clínica Angloamericana.
El especialista explicó que de este tipo de fármacos de síntesis sintética tofacinib es el único para la artritis reumatoide y que su costo es del 30% menos al de un tratamiento biológico. «El tofacinib está en el grupo de las pequeñas moléculas. Los mecanismos son sumamente complicados. Los biológicos son moléculas muy grandes que actúan en el sustancias que llevan el mensajes entre una célula y otra, pero fuera de la célula, mientras que los medicamentos sintéticos de moléculas pequeñas tienen la particularidad de que actúan dentro de la célula, más microscópicamente y el mecanismo de acción es a nivel de una serie de pasos en donde se transmite el mensaje y llega incluso el gen y el ADN para producir la respuesta de controlar un mecanismo que estaba descontrolado».
En el Perú existen no menos de 150 mil personas con artritis reumatoide pero no llegan ni a mil los pacientes que reciben este medicamento. «Tenemos seguramente unas 149 mil personas que sufren de esta enfermedad y que no reciben ningún tratamiento. Si sacamos un cálculo muy conservador de que solo la tercera parte se deforma estamos hablando de 50 mil personas, pero normalmente son las dos terceras partes. Probablemente sean 80 mil personas que se van deformando, discapacitando o muriendo por no recibir este medicamento» sentenció el especialista.