ENTREVISTA A LA DRA. KARIM JACQUELINE PARDO RUIZ, DIRECTORA EJECUTIVA DE LA DIRECCIÓN DE PREVENCIÓN Y CONTROL DE ENFERMEDADES METAXÉNICAS Y ZOONOSIS.
El MINSA está elaborando protocolos y preparando los laboratorios para inocular millones de mosquitos Aedes aegypti con bacteria wolbachia que bloquear la capacidad del mosquito de transmitir virus como el dengue, zika y chikungunya.
Después de la buena respuesta que ha tenido en países como Colombia, México, Brasil y en el continente europeo, el Ministerio de Salud a través de la Dirección de Prevención y control de enfermedades metaxénicas y zoonosis, ha iniciado como nueva estrategia para el Perú el piloto de inocular millones de mosquitos Aedes aegypti con bacteria wolbachia para evitar el contagio de dengue, sika y chikungunya.
“Durante todos estos años siempre se ha hecho algo por dengue pero el conocimiento y los avances nos está siendo virar para nuevas estrategias. Estamos en la fase cero del piloto, eligiendo bien el lugar y los laboratorios que se necesitan para esto. Por ahora hay dos que cumplen con los requisitos, además del Instituto Nacional de Salud, hay un laboratorio en Sullana y otro es en Iquitos, ambas zonas son endémicas” indicó la Dra. Karim Pardo, quien dirige esta lucha por parte del MINSA.
La Dra. Pardo explica que a los mosquitos Aedes aegypti hembras y macho, se le inocula la bacteria wolbachia para que estos mosquitos la transmitan a sus huevos y los nuevos mosquitos nazcan con la batería. “Esta bacteria se localiza en el intestino del mosquito y es inofensiva para ellos, pero cuando el mosquito pica a una persona con dengue la wolbachia tiene la capacidad de envolver el virus o comérselo. De modo que cuando este mosquito pica a una persona sana ya no transfiere el virus” subraya.
Esta nueva estrategia ha sido exitosa en otros países que, hasta ahora, no tenía tener un control del dengue. En el Perú la estrategia que se estaba llevando a cabo era la de la fumigación de las zonas con mayor número de contagios y de educación de la población para no tener pozos de agua donde el mosquito pueda reproducirse. No obstante, la Dra. Pardo señala que esto demandaba muchos recursos.
“Se mucho esfuerzo, personas y dinero fumigando. Los resultados son buenos pero dependemos mucho de la población porque es una actividad que salud deberían hacerlos ellos solos. También es un tema de los gobiernos locales. Imagínate tocan una puerta de una casa y te dicen pase y limpien mi huerta, mi patio y mi jardín. El personal de salud limpiando un patio cuando debería ser una actividad y responsabilidad familiar y personal” indica la especialista.
Para iniciar el piloto, la Dra. Pardo también señala que se necesita del apoyo población y que está tenga conocimiento de lo que se va realizar, ya que al inocular miles de mosquitos y soltarlos en una zona, va abundar y muchas personas pueden pensar que han empeorado la situación. Por lo mismo, pide paciencia para que los nuevos mosquitos con la bacteria puedan sobrevivir y reproducirse hasta que ocurra el recambio.
Como se conoce, Perú es parte de los 26 países que se han comprometido a hacer búsqueda de nuevas alternativas para combatir al dengue y compartir la estrategia en las cuales estamos involucrados. “Estamos atentos a las nuevas estrategias y a lo que vienen haciendo bien los oros países. Lamentablemente una de las estrategias que han usado algunos países es una vacuna que no dio resultado pues muchos veíamos a esta como una esperanza”, recuerda.
CASOS
El número de casos de dengue que hemos tenido en el 2018 poco menos de 6,900 casos aproximadamente. Un número bastante por debajo de los 67 mil casos en el 2017. “Ahora solo tenemos el 10% de lo que tuvimos en el 2017, pues fue un año en que pegó fuerte el fenómeno del niño” sustenta la Dra. Karim Pardo.
“Si se ve la cifra global por país estaríamos felicitándonos pero si lo vemos por región, no. Hay regiones que necesitan de más esfuerzo. En el 2017 fallecieron 70 personas por dengue lo cual es un montón. Lecciones aprendidas, todo el 2018 hemos combatido al vector, se trabajo con la comunidad y vigilancia febriles, médicos y enfermeras de hospitales de contención para que rápidamente se pueda identificar signos de alarma”
En efecto, en Piura en el 2017 hubo 44 mil casos de dengue y este 2018 está en 1,200. Loreto no ha podido disminuir su cifra del 2017 de 1,100, por el contrario aumentado el 2018 a 2,000. Madre de Dios, debido a las huelgas en el sector salud ha empeorado su situación y de lo que reportaba 500 casos al año han cerrado el 2018 con 1,500 casos. “No se descarta que para este 2019 haya más casos. Es difícil evitar pero hay que evitar que las curvas sean grandes. Y si tengo un enfermo de dengue este controlado y no fallezca” indica la especialista.
En sika, los brotes también fueron a causa del fenómeno del niño en el 2017. Solo para muestra en Lreto se presentaron 2,200 casos aquel entonces, pero el 2018 solo 165. Otros lugares que no han podido hacer mucho en sika son en el departamento de Amazonas sobre toda en Bagua. En lo que es chikungunya el promedio de casos anual es de 80 a 100 en todo el país.
En cuanto a malaria, el 96% de los casos se concentra en Loreto y la cifra es pequeña. El 4% restante está en varias partes del país pero por personas que han sido contagiadas en Loreto y han viajado llevando la enfermedad. Con lo que trabajando en esa zona se puede erradicar totalmente la enfermedad. Sin embargo, lo que generado preocupación son los 100 casos de malaria en pacientes venezolanos que se están trasladando a zonas donde no había malaria. Un ejemplo es Tumbes donde hace ochos años que no se reportaba malaria y hoy en día hay 17 reportes, debido a la migración.