DESMIENTEN A MÉDICOS ITALIANOS QUE SEÑALAN QUE EL COVID-19 SEA MENOS LETAL QUE ANTES

La pandemia está teniendo un control en países que tomaron medidas contundentes, como el confinamiento estricto y la detección temprana. Hoy estos sufren altibajos y pequeños rebrotes, en zonas identificadas lo cual ha hecho que los fallecimientos vayan en descenso poco a poco de forma generalizada, sobre todo en Europa.

Sin embargo, el médico italiano Alberto Zangrillo, responsable de cuidados intensivos en el Hospital San Raffaele de Milán, ha generado controversia al afirmar en la RAI (la televisión pública italiana) que “el virus, prácticamente, desde el punto de vista clínico, no existe más”.

Zangrillo escuda sus declaraciones en un estudio de su colega Massimo Clementi, director del Laboratorio de Microbiología y Virología de ese mismo centro y profesor de la Universidad Vita-Salute, que ha analizado a 200 pacientes.

Clementi señala que al comparar la carga viral de los pacientes actuales con los que tenían en marzo, la cantidad de virus es mucho menor y también su capacidad para replicarse. “Ahora estamos viendo una enfermedad diferente de la que vimos en pacientes en marzo o abril. La brecha es abismal», afirmó.

Esto debido a que casi ya no hay pacientes en las UCI, y en el hospital llegan pocos y “todos con síntomas leves”. No obstante, y muy importante, reconoce que esto no significa que el virus haya mutado hacia una forma menos virulenta –pues no tiene pruebas para afirmar eso–, sino que pueden haber influido otros factores, como unas “condiciones ambientales más favorables”, por ejemplo, indicó.

Estas declaraciones generaron falsas expectativas en la población de otras regiones como Sudamérica que están viviendo donde los sistemas de salud están colapsados y el número de muertes va en aumento.

Es por eso que la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha tenido que salir a desmentir estas conclusiones.»Debemos ser excepcionalmente cuidadosos para no dar la sensación de que, de repente, el virus ha decidido ser menos patógeno por su propia voluntad. Ese no es el caso en absoluto» señaló Michael Ryan, director ejecutivo del Programa de Emergencias Sanitarias.

SIGUE SIENDO EL MISMO

Agustín Valenzuela, virólogo y director del Grupo Inmunología Celular y Viral de la Universidad de La Laguna, aseguró que está por demostrar que el supuesto nuevo virus, con cuadros de covid-19 menos letales o severos, tenga una secuencia distinta a la del que circulaba en febrero o marzo. “De momento, esa observación no tiene una base genómica ni virológica que indique que estamos frente a la emergencia de una cepa viral no letal”, subrayó.

Incluso, según la base de datos GISAID, que comparten científicos de todo el mundo, se indica que de acuerdo con las secuenciaciones genéticas que se realizan en todo el mundo el coronavirus es muy estable y aunque un virus evoluciona continuamente, por el momento ni siquiera se puede hablar de que haya generado cepas diferentes a la original, según los expertos.

“La tasa de mutación es muy baja, así que esa hipótesis de los médicos italianos es bastante descartable”, afirma Ismael Mingarro, directivo de la Sociedad Española de Bioquímica y Biología Molecular (SEBBM) y catedrático de la Universidad de Valencia, que trabaja en un proyecto sobre las proteínas de la envuelta de SARS-CoV-2.

Una explicación más lógica a las observaciones de los médicos italianos al margen del propio coronavirus es que «los pacientes tengan una menor carga viral, simplemente, porque llegan pronto a consulta. Al comienzo los afectados no sabían lo que tenían y cuando aparecían en los hospitales ya sufrían con una fuerte neumonía, pero ahora se hacen más test y se diagnostican antes”, señaló Mingarro.

Por su parte, Iván Moreno, médico internista y miembro de la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI), señala que en España, “hemos controlado el virus en centros hospitalarios, dejándolo en casa. Ahora estamos saliendo con mascarillas y mejor concienciados con la higiene y el distanciamiento social”, así que “la facilidad de transmisión e infección se ha rebajado”, sustentó.

Añadió también que “ahora sabemos identificar mejor a los sintomáticos leves, y a graves incipientes, por lo que todos estos factores unidos pueden ayudar a que tengamos esta sensación epidemiológica de un virus o cuadros covid-19 menos graves, más manejables”, sin que el virus en sí mismo haya sufrido modificaciones significativas.