¿LUNAR PELIGROSO? ESTE ES EL «A,B,C,D,E» DE LA PREVENCIÓN EN CÁNCER DE PIEL QUE DEBES CONOCER

Según los últimos registros del Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología del Perú (Senamhi) en el Perú se registra radiación entre 14 a 18 puntos, índices extremadamente altos de radiación ultravioleta (UV). Es por esta razón que debemos estar más atentos a los cuidados que necesita nuestra piel, la incorrecta exposición al sol puede generar la aparición de lunares malignos.

Los lunares son pequeñas manchas o bultos que aparecen en la piel. La mayoría de ellos son benignos y podemos tenerlos desde el nacimiento. Pero también están los lunares adquiridos con el tiempo, a causa de la exposición al sol.

A pesar de que la mayoría de personas desarrolla lunares, no todos están conscientes de si estas “manchitas” son benignas o malignas y, muchas veces, no identifican si los lunares cambian de forma, tamaño o color.

¿Cómo diferenciar un lunar bueno de uno malo? El oncólogo especialista en piel de Oncosalud, Dr. Martín Falla, nos enseña el “A,B,C,D,E” para ayudarnos a identificar un posible lunar cancerígeno.

A. Asimetría: presta mucha atención si la mitad de tu lunar no corresponde con la otra mitad.

B. Bordes irregulares: revisa si los bordes del lunar no están bien definidos y no se aprecia con exactitud dónde empieza y dónde termina la lesión.

C. Color: si el lunar presenta más de un color, como café, negro, verde y/o rojo debe conducirnos a estudiar con más rigor la lesión que tenemos.

D. Diámetro: cuando un lunar mide más de un centímetro de diámetro o ha crecido desde la revisión anterior, debemos ponernos alertas.

E. Evolución: es importante observar si con el paso del tiempo el lunar cambia de tamaño, forma o color.

Si tienes muchos lunares quizás sea más difícil identificar los cambios, en tal caso, es importante visitar periódicamente a un especialista. Oncosalud te recuerda que la prevención es la mejor arma para vencer el cáncer.